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Aleksandr Ródchenko: La Muerte de La Pintura 

Aleksandr Ródchenko (San Petersburgo, 1891), fue uno de los artistas rusos más polifacéticos del siglo XX.  Autodenominado como "artista del diseño", Ródchenko realizo obras como pintor, escultor, diseñador gráfico y fotógrafo.  Fue uno de los fundadores del constructivismo ruso, movimiento fuertemente comprometido con las ideas del comunismo, que buscaba llevar el arte a la vida de las personas y construir una nueva sociedad. A pesar de esto su arte no era propagandístico, como sí lo sería el arte posterior surgido del régimen. En septiembre de 1921 Ródchenko realizo una de las declaraciones más interesantes en la historia del arte: con sus "tres lienzos" con los colores primarios, declaro la muerte de la pintura. Esta afirmación será el tema central del texto; el proceso que llevo a Ródchenko a su declaración más radical como artista. 

Luego de haber trabajado diez años en la pintura buscando crear una obra que no contuviera ni los objetos de la realidad exterior, ni ninguna idea o sentimiento que el artista quisiera insertar; un arte puro, que no remitiera a la mente más que a la pintura en sí y sus “elementos materiales”. Róchenko, llevando esta idea a lo más radical, concluye que esos tres cuadros con los colores primarios es lo más lejos que se puede llegar con la pintura, encerrada dentro de los límites del lienzo. 

 El objetivo de la "pintura sin objeto" del artista ruso era liberar los elementos materiales de la pintura: colores, luz, tono, líneas, planos, volumen, espacio; que se habían vuelto invisibles ante las representaciones de la realidad exterior,o de las ideas y sentimientos interiores de los pintores. Para él era importante destacar el valor propio de estos elementos, volverlos visibles de nuevo, llamar la atención sobre ellos. Para ello había que suprimir tanto al objeto como al sujeto en las pinturas. No quería representar nada, más allá del cuadro. 

 Durante este proceso Ródchenko y sus compañeros constructivistas, se dieron cuenta de que también había que liberar a los colores de cualquier valor  psíquico de expresión, es decir: los tonos no deben  expresar sentimientos ni provocar ninguna reacción emotiva, para poner en evidencia sus propiedades inmanentes, libres de toda otra función utilitaria

El color, ‘la materia prima de la pintura’ cada vez va cobrando mayor importancia frente a los demás elementos en las pinturas de Ródchenko: la línea empieza a desaparecer y ahora sólo hay mezclas de colores, además empieza a evitar ciertas mezclas de colores que pudieran conducir a ideas sobre el carácter expresivo de los estos. Así Ródchenko se fue acercando a la conclusión más radical de la pintura sin objeto: la monocromía pura. 

 Ródchenko llega a la conclusión más radical de su idea sobre la pintura: "los tres lienzos" con los colores primarios, cualquier otra variación pictórica es inadmisible, porque implicaría una oposición entre la figura y el fondo, dando lugar pues a espacio imaginario, composición, exceso.  Con respecto a su obra Ródchenko afirma: He llevado a la pintura a su final lógico y he expuesto tres cuadros, uno rojo, uno azul y uno amarillo, con la decisión de que todo ha terminado. Son los colores primarios. Cada superficie es una superficie y no debe haber ninguna representación. Cada superficie tiene hasta sus límites un único color. En esos tres cuadros presenciamos la liberación del color de la forma; y a la vez, se hace notar su limitación esto a causa de  la presión de la realidad que hace que los límites del cuadro mismo le impongan una forma al color. Los tres lienzos fueron las últimas obra pictóricas realizadas por Róchenko, para él la pintura no tenía futuro. A partir de ese momento su arte seria construir en (y para) la realidad.